La adquisición es estratégica para la empresa estadounidense, ya que le permitirá aprovechar beneficios como las normas de comercio exterior de EE.UU., que permiten importar paquetes de hasta 800 dólares sin pagar impuestos, según un consultor.
El principal objetivo de UPS al adquirir Estafeta es aumentar su capacidad logística en México en el sector de mensajería y paquetería, un mercado en crecimiento que el año pasado alcanzó un valor de 2,500 millones de dólares, según el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi). Además, los beneficios prometidos por el nearshoring son demasiado importantes para esperar.
Entre 2013 y 2023, el sector creció un 145%, lo que equivale a un aumento anual promedio de 9.4%. En comparación, este crecimiento es 6.5 veces mayor que el de la economía del país en ese mismo período.
La transacción, más que inesperada, es el resultado de una alianza iniciada en 2020 entre las empresas, con el objetivo de que las pymes pudieran aprovechar todas las infraestructuras disponibles para que sus envíos a Estados Unidos llegaran en un día.
UPS venía estudiando la operación desde hace tiempo, ellos hacen las cosas con mucha calma. Estafeta es una marca de gran prestigio y sus siguientes pasos eran dudosos por temas de competencia e internos, vinculados a su gobierno corporativo. De aprobarse la operación y al unir fuerzas tendrán mayores elementos para competir con DHL y FedEx”, comentó el consultor en comercio exterior, Manuel Díaz.
Desde su perspectiva, UPS busca aprovechar una regla comercial de Estados Unidos conocida como «3,2,1», que permite a las empresas de paquetería importar hasta 800 dólares por paquete sin pagar impuestos. Un ejemplo de esto sería traer un contenedor de trajes de baño de China a México, almacenarlo en un recinto fiscalizado y luego enviarlo a Estados Unidos a través de una empresa de paquetería en paquetes individuales, evitando así los impuestos.
Para el consultor, uno de los principales beneficios para UPS en México es la extensa infraestructura de Estafeta: seis aviones, 129 centros de operación, cuatro hubs (en San Luis Potosí, Ciudad de México, Veracruz y Estado de México) y más de 6,000 unidades terrestres de diferentes tamaños que les permiten llegar a lugares remotos.
Un negocio sin carga
Según las cifras de cuentas nacionales del Inegi, el año pasado las empresas del subsector 492, correspondiente a Mensajería y Paquetería, generaron servicios por un valor de 43,511 millones de pesos corrientes, aproximadamente 2,500 millones de dólares, considerando el tipo de cambio promedio de 2023.
El comercio electrónico ha sido el principal impulsor del sector, con un crecimiento anual compuesto del 37.5% en los últimos cinco años, alcanzando un valor de 658,300 millones de pesos en 2023, según la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO) en su más reciente Estudio de Venta Online, presentado en febrero pasado.
La pandemia de Covid-19 fue un factor acelerador, ya que las medidas de distanciamiento social incrementaron la demanda de servicios de entrega y última milla.
Según el Inegi, en 2020, mientras la economía mexicana se contrajo más del 8%, el PIB del sector de paquetería creció un 10.8%. En 2021, con la persistencia del virus y el alargamiento de las medidas preventivas, el crecimiento del sector se disparó al 19.4%, mientras la economía crecía a un ritmo del 6%.
En 2022 y 2023, el crecimiento del sector fue más moderado (8% y 5.4%, respectivamente), pero siguió superando la expansión del PIB total (3.7% y 3.2%).
En este contexto, queda por ver qué sucederá con el servicio de carga que ofrece Estafeta en México, ya que actualmente es un servicio limitado a empresas mexicanas. En 2011, FedEx compró la empresa mexicana de mensajería y paquetería MultiPack, pero no incluyó los servicios de carga.
Finalmente, otro objetivo del reciente anuncio de compra, que busca apoyar aún más a los clientes que están acercando la fabricación y distribución de mercancías a EE.UU., es enfrentar los retos de la competencia logística actual, como la logística verde, la entrega al día siguiente y el costo de operación, según Manuel Díaz.